domingo, 22 de noviembre de 2009

Y NORTE DE SANTANDER ¿QUÉ?

Los secretos de los colegios santanderanos para estar entre los mejores del país
La preparación para la presentación de las pruebas ha resultado fundamental en los resultados obtenidos por los alumnos santandereanos. Según estudios, mejora más del 50 por ciento la posibilidad de acertar.
Nueve están entre los 50 primeros lugares y ningún otro departamento tiene una cifra similar; el mejor colegio del país en listado de la Revista Dinero es de Floridablanca (Santander).
Y otras dos instituciones educativas de esa región figuran entre las 30 mejores del país.
Además, estos tres colegios mejoraron sus posiciones con respecto al año pasado. La Quinta del Puente, por ejemplo, pasó del quinto puesto, al primero; el San Pedro Claver, de Bucaramanga, subió del 58 al 17, y el Rosario, de Barrancabermeja, se ubicó en el lugar 29 después de estar tener el 61 en el 2008.
Y aunque estadísticamente la probabilidad de que un colegio tenga más de un estudiante entre los 50 mejores es poca, El San Pedro Claver y el Instituto Nacional de Comercio (este último oficial), reportan, cada uno, dos jóvenes dentro del 'top 50' del Icfes.
El éxito de Santander en términos educativos es innegable y obedece a una política de mejoramiento de la calidad que ha emprendido el departamento, que pasa por la adecuación de las sedes educativas y la capacitación de maestros, y a las propuestas pedagógicas innovadoras de los colegios privados.
De acuerdo con Laura Cristina Gómez, Secretaria de Educación del departamento, esa posición puntera es el reflejo de una preparación sistemática para "alistan a los muchachos para obtener resultados óptimos desde el inicio de sus vidas".
Y tiene que ver también con el reconocimiento de la calidad educativa como uno de los ejes fundamentales del desarrollo en los que se ha centrado el departamento después de lograr una cobertura en educación de 93,6 por ciento en los 83 municipios que administra la gobernación y de invertir cerca de 15 mil millones de pesos en construcción de nuevas sedes y mejora de las existentes.
Aunque a los docentes también se les debe el éxito. "En Santander, la condición de maestro todavía tiene un estatus muy fuerte dentro de la comunidad", señala Julio Acelas, director del Observatorio de Derechos Humanos de Santander, para hacer énfasis en la responsabilidad que tienen frente a la calidad de la educación que se imparte en el departamento.
Y por eso la Secretaría de Educación se ha esforzado en capacitarlos. "En lo corrido de este gobierno cerca de dos mil docentes han recibido formación" en diez líneas estratégicas que impactan el comportamiento pedagógico, explica la Secretaria Gómez.El uso de las tecnologías, la segunda lengua, el desarrollo de competencias y las metodologías pedagógicas son algunas de esas áreas claves.
Aunque "el amor, la responsabilidad y el compromiso con su labor", son los factores que más rescata de los maestros santandereanos Matilde González, rectora de La Quinta del Puente.
Se preparan para el Icfes
Pero dentro de los motivos que han generado los buenos resultados, en los últimos dos años también se reconoce la realización de simulacros de la prueba el Icfes, una estrategia que ha implementado la administración departamental en todos los colegios públicos, para familiarizar a los jóvenes con el tipo de cuestionario. Y parece que surte efecto.
"Sin simulacros no me hubiera ido igual, hacerlos es importante para aprender a manejar las preguntas y el tiempo de respuesta", dijo Diana Camila Gómez, otra de las estudiantes dentro del grupo de los cincuenta mejores.
De hecho, a nivel internacional el fenómeno se conoce como "efecto training", según el cual la aplicación de pruebas mejora en más de un 50 por ciento las posibilidades de responder adecuadamente los exámenes no creativos, como las que aplica el Estado.
El problema viene cuando los colegios se centran en obtener buenos resultados en el examen. "Eso es un error", dice el padre Gerardo Arango, rector del Colegio San Pedro Claver, donde estudia Diana.
Para el sacerdote, "hay que formar a los muchachos para la vida" y más que con los resultados del Icfes, el verdadero triunfo de la educación se mide cuando los jóvenes salen de las universidades. "Lo realmente importante es si asumen liderazgo en el país".
Porque la medición y clasificación de planteles y alumnos a partir de un solo referente nacional como las pruebas de Estado tiende a ser "reduccionista y limitado", de acuerdo con Víctor Manuel Gómez, miembro del Instituto de Investigación en Educación de la Universidad Nacional.
Gómez se refiere a que "la calidad es un asunto mucho más amplio y el peligro de legitimar el examen es que lo que este evalúa deja de lado las competencias ciudadanas, la formación científica, estética y física de los estudiantes".
Y aunque en ese sentido, dice Gómez, sería probable cambiar la lista de los mejores incluyendo indicadores diferentes, lo cierto es que los estudiantes de Santander están sacando el pecho por sus resultados y se están tomando en serio ese "salga adelante" que recurrentemente se oye en los hogares y, según Acelas, se ha convertido en un arquetipo cultural.
Claves de la calidad educativa en Santander
"Si quieres formar hombres grandes enséñales a disfrutar su tiempo libre". Esa es la filosofía del padre Gerardo Arango, rector del Colegio San Pedro Claver de Bucaramanga, reconocido tradicionalmente por su calidad.
Y aunque en efecto los jóvenes gozan de libertad en ciertas horas, también tienen estrictas jornadas de dedicación académica en las que el reto es lograr la mayor concentración posible.
Pero, más allá del tiempo, en el San Pedro, "los alumnos están estimulados para que crean en sí mismos y en las posibilidades de salir adelante", señala el sacerdote.
Por su parte, Matilde González, directora del Colegio La Quinta del Puente, señala que la clave del éxito en la educación de un niño está "en lo que se haga con él entre el día que nace y los seis años. Esa es la base que determina su rendimiento en la vida futura", dice.
Y claro, un ambiente que permita un desarrollo sano de la personalidad.

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