EL GENEROSO SEÑOR CADIVI

Columna de Alfredo Yañez C Periódico La Opinión

Amables lectores: Terminó el 2008. Para fortuna de los cucuteños, en Venezuela nació hace un par de años, no un Chavecito para reemplazar cuando se envejezca el Chávez grande, sino un prodigioso producto, engendrado por fortuna, para dar tranquilidad económica al cucuteño, pues produce en el venezolano que lo posea un estado mental que solo le permite “comprar, comprar y comprar”.

Los sicólogos expertos lo comparan con el deseo intrínseco del presidente Uribe de “gobernar, gobernar y gobernar por los siglos de los siglos”.

Después de esta introducción nos preguntamos: ¿Qué es Cadivi? “Elemental”, mis queridos compatriotas, como diría la doctora María del Pilar, ex directora del DAS cuando le preguntaban cómo era el seguimiento a “Petro y su combo”.

Aclaro, que así contestaba antes de su “renuncia” y de ser nombrada, como pago a su silencio, embajadora de Colombia en Suiza. Qué equivocado estaba Newton, cuando nos enseñaba en sus escritos que existía una fuerza llamada de la gravedad, que atraía a todos los cuerpos hacia la tierra. En Colombia, señor Newton, los amigos del gobierno, con ligeras excepciones, caen hacia arriba. Le dejamos Isaac, de tarea, estudiar el por qué de este fenómeno.

Volviendo a la palabrita, Cadivi es una tarjeta de crédito venezolana, con un cupo anual hasta por cinco mil dólares preferenciales (2150 bolívares por dólar). Para explicar como opera y lo llamativo del negocio, lo explicaré con un simple ejemplo: “Don Gastón Pájaro Cuadrado” (los apellidos son reales solo se cambió el nombre), llega a la ciudad, vía terrestre, después de superar los inconvenientes, de no traer pesos, norma impuesta por San Simón en los peajes, pero tolerada tristemente por todos los cucuteños. No se tuvo ninguna consideración con el señor “Pájaro”, por parte de los funcionarios de San Simón.

El trancón era tan enorme, que algún cucuteño, no empleado de San Simón, se dolió y canceló los 2.000 pesos. Se instala en el hotel y sale a recorrer la ciudad. Observa muchos letreros con la siguiente leyenda: “Se compra cupo Cadivi”. Llega a uno de estos puntos, pasa su tarjeta por el datáfono y ojo, observemos, como “Don Gastón”, se convierte por obra y gracia del presidente Chávez en un pequeño rey Midas (todo lo que tocaba se convertía en oro).

Cinco mil dólares de cupo por 2.150 bolívares por dólar es igual a 10.750.000 Bolívares (esto debe cancelar cuando le llegue el cargo a su banco en Venezuela). Sigamos en nuestra operación en Cúcuta. Cinco mil dólares por 2.200 pesos por dólar (precio promedio del dólar en Colombia) es igual a 11.000.000 de pesos menos el 15%, por el “favorcito” de pasarle la tarjeta por el datáfono y posiblemente darle todo en efectivo le quedan 9.350.000 (11.000.000 menos 1.650.000 por favorcito).

Debe enviar a su cuenta en Venezuela, 10.750.000 bolívares, que le cargarán cuando llegue a ese país la utilización. Estos bolívares los compra en una casa de cambio de la ciudad a 0,50 pesos por bolívar, gastándose 5.375.000 pesos quedándole por lo tanto libres y como regalo de papá Chávez 3.975.000 (9.350.000 menos 5.375.000) Esto está disponible para gastar en Cúcuta. Pero como “Don Pájaro Cuadrado”, no viene solo, sino trae a su esposa de nombre “Felicidad” (no podía llamarse de otra manera con los apellidos de su marido), dos hijos, la suegra y el suegro, este último de apellido Redondo, debe ser que por la edad dejó de ser Cuadrado.

En total 6 cupos Cadivi que le dan a la familia una disponibilidad de gasto en Cúcuta de 23.850.000 pesos (6 por 3.975.000).Como ven así se genera la bonanza actual en Cúcuta. No nos desbordemos. Todo lo legal si se abusa puede perder esa legalidad. Las operaciones de los comerciantes deben ser claras, totalmente de acuerdo con su actividad y compras a los proveedores.

No olviden identificar claramente al titular del plástico.Un señor venezolano, en trámite de separación, le pregunta a su esposa: “¿Qué es lo que más vas a extrañar de mi?” Ella, con los ojos llenos de lagrimas le responde: “Tu cupo Cadivi”. Un feliz año para todos.