Tomado Periódico PORTAFOLIO
Carlos Germán Quintero aceptó haber falsificado cuentas de cobro y facturas para hacerse con la plata de las cuentas a su cargo.
El castigo por uno de los casos de robo interno más sonados de los últimos años, el del ex tesorero de Bavaria Carlos Germán Quintero, será decidido por un juez de la capital del país en las próximas semanas. En agosto pasado, apenas un mes después de que fue detenido por las autoridades bajo la acusación de haberse apoderado de 1.523 millones de pesos de la empresa -una de las más grandes de Colombia-, Quintero aceptó los cargos en su contra y llegó a un preacuerdo con la Fiscalía.
El castigo por uno de los casos de robo interno más sonados de los últimos años, el del ex tesorero de Bavaria Carlos Germán Quintero, será decidido por un juez de la capital del país en las próximas semanas. En agosto pasado, apenas un mes después de que fue detenido por las autoridades bajo la acusación de haberse apoderado de 1.523 millones de pesos de la empresa -una de las más grandes de Colombia-, Quintero aceptó los cargos en su contra y llegó a un preacuerdo con la Fiscalía.
Aunque todavía insiste en que fue presionado por supuestos delincuentes que lo obligaron a defraudar a la cervecera con amenazas a su familia, reconoció que falsificó facturas y cuentas de cobro, y que él mismo ordenó pagarlas con dinero de las cuentas que estaban a su cuidado. Según el ejecutivo, fueron unos 1.250 millones de pesos, 273 millones menos de los que aparecen en las investigaciones de la Fiscalía.
Por colaboración con la justicia y reparación a la víctima -ofreció entregar bienes por 963 millones de pesos y firmar un pagaré por el resto- recibiría una pena efectiva de 70 meses de prisión, es decir casi seis años.
Lo pillaron en vacaciones
Cómo logró desviar los fondos y las situaciones que lo dejaron expuesto ante la justicia conforman un capítulo que los responsables de la seguridad interna de las grandes empresas seguramente están siguiendo al milímetro.
Hasta julio del año pasado, Quintero logró mantener una estrategia delictiva que, de acuerdo con las investigaciones, habría arrancado en marzo del 2007. Pero mientras estaba en vacaciones, una de sus asistentes llamó a un banco para verificar unas cuentas de cobro que llamaron su atención y se encontró con la sorpresa de que eran falsas. Más tarde quedó claro que el modus operandi no era muy sofisticado: con un computador portátil que le suministró la propia empresa y aplicaciones básicas, el ex tesorero escaneó firmas y se autoenvió correos electrónicos.
En total fueron 37 documentos por conceptos como gravamen a movimientos financieros, terminación anticipada de contrato, sobregiros bancarios y comisión de bonos, que llevaron a sus cuentas personas entre 20 y 84 millones de pesos por transacción. "Estas cuentas de cobro y facturas -dice la Fiscalía- eran enviadas por Carlos Germán Quintero a sus funcionarios con la autorización y las instrucciones para que se tramitaran los respectivos pagos y se ordenara la elaboración de los respectivos cheques de gerencia".
Un mensajero los recogía y se los entregaba a él o a la funcionaria de un banco cuya actuación también está en la mira de las autoridades."A través de este proceso, el señor Quintero Quiroga tramitó y autorizó el pago de varios cheques que fueron utilizados para cubrir obligaciones personales y gastos ajenos al objeto social de Bavaria", concluyó la Fiscalía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario