En un sentido homenaje a la vida y obra de monseñor Jaime Prieto Amaya, se convirtió su sepelio al que asistieron las autoridades más representativas de la ciudad y el departamento.
Los actos exequiales que se prolongaron por más de tres días tuvieron fin al momento del enterramiento efectuado en una cripta de la Catedral San José de Cúcuta, pasado el medio día.
La Alcaldesa de Cúcuta María Eugenia Riascos Rodríguez entregó a los familiares del fallecido obispo un documento oficial en el que se exaltó la labor pastoral y social de monseñor Jaime Prieto Amaya, desarrollado a lo largo de toda su vida.
Mediante Decreto 0369 del 30 de agosto la Alcaldía de Cúcuta exaltó la vocación y el servicio al prójimo y lo nombró ejemplo para las generaciones del país.
A la ceremonia del funeral asistieron los obispos del país, el Arzobispo de Bogotá, Rubén Salazar, el Nuncio Apostólico, Aldo Cavalli y sacerdotes de las diferentes diócesis.
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