Una mujer tenía clavado un cuchillo en la espalda y no se dio cuenta sino hasta que llegó a la casa
Se trata de una joven rusa de 22 años que fue apuñalada por un ladrón que intentó robarla.
La foto de Julia Popova fue revelada este jueves por los médicos que la atendieron en aquella noche en Moscú, Rusia.
Según contó la joven, ella forcejeó para evitar el asalto y acabó sufriendo un terrible apuñalamiento por la espalda.
Al parecer, estaba tan traumatizada por el ataque que se fue a casa sin darse cuenta de que tuvo por 40 minutos un cuchillo incrustado en la espalda. Ella no sintió nada, fueron sus padres los que comprobaron con asombro lo que le había ocurrido a su hija.
Según el diario británico Daily Mail, los médicos que la atendieron confirmaron la veracidad de este hecho insólito. En la imagen, se puede ver como los cirujanos la miran con asombro, mientras se preparan para operarla.
"Tuvo mucha suerte, el cuchillo estaba clavado en el hueso, no dañó ni la médula espinal ni las arterias, es un caso único y extraordinario", dijo el cirujano jefe del hospital donde fue atendida.
A pesar del tamaño del cuchillo, este no afectó ni la espina dorsal ni alguno de los nervios del cuello, razón por la que Popova se está recuperando sin problemas del ataque.
Se trata de una joven rusa de 22 años que fue apuñalada por un ladrón que intentó robarla.
La foto de Julia Popova fue revelada este jueves por los médicos que la atendieron en aquella noche en Moscú, Rusia.
Según contó la joven, ella forcejeó para evitar el asalto y acabó sufriendo un terrible apuñalamiento por la espalda.
Al parecer, estaba tan traumatizada por el ataque que se fue a casa sin darse cuenta de que tuvo por 40 minutos un cuchillo incrustado en la espalda. Ella no sintió nada, fueron sus padres los que comprobaron con asombro lo que le había ocurrido a su hija.
Según el diario británico Daily Mail, los médicos que la atendieron confirmaron la veracidad de este hecho insólito. En la imagen, se puede ver como los cirujanos la miran con asombro, mientras se preparan para operarla.
"Tuvo mucha suerte, el cuchillo estaba clavado en el hueso, no dañó ni la médula espinal ni las arterias, es un caso único y extraordinario", dijo el cirujano jefe del hospital donde fue atendida.
A pesar del tamaño del cuchillo, este no afectó ni la espina dorsal ni alguno de los nervios del cuello, razón por la que Popova se está recuperando sin problemas del ataque.
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