martes, 1 de marzo de 2011

SANTURBAN PUNTO DE UNIÓN DE LOS DOS SANTANDERES


Aunque es política del gremio, no apoyar acciones de hecho, queremos manifestar nuestro apoyo a la campaña liderada por Fenalco Santander, en contra del proyecto de explotación minera en el Páramo de Santurbán. La manifestación fue un éxito por su concurrencia y la demostración del rechazo de toda una comunidad que va tomando conciencia que el agua y el medio ambiente son mucho más que el oro del futuro. Estamos en total acuerdo y respaldamos el rechazo que nuestros colegas del sur están liderando en contra de tan aberrante proyecto. El punto de unión de los Santanderes está dado y creemos que les corresponde a los dos gobernadores continuar el liderazgo en defensa de esta gran región. Es el enfrentamiento de la grandeza de los dos Santanderes al poderío de una transnacional que pretende acabar un ecosistema casi único en el mundo y por lo tanto tesoro de nosotros los habitantes más cercanos, de Colombia y del mundo entero.
FENALCO es abanderado del estímulo a la inversión y de la seguridad jurídica pero como seccional del Norte de Santander vemos que se pretende cometer otra injusticia con nuestra región en donde solo se practica la política de extracción pero no la de inversión; ya lo dijimos en los comentarios anteriores, como en más de un siglo de extracción de petróleo, las gentes del Catatumbo no tienen hoy una carretera para sacar unos bultos de yuca al mercado de las ciudades; con base en contratos inconsultos y cuya legalidad es discutible, nos ponen en la situación del Mercader de Venecia: Antonio debe pagar con una libra de su propia carne por no cumplir un compromiso a un usurero judío; afortunadamente, según Shakespeare, dos bellas abogadas lograron que la justicia se quitara la venda de los ojos y librara a Antonio de tamaña obligación.

Con solo oír hablar de las toneladas de cianuro se nos encoje el pecho. Las lagunas, del páramo, de belleza indescriptible, en cuyos espejos se fusiona la tierra con el cielo, serán reemplazadas por lagunas de oxidación. Esas aguas virginales, impolutas serán convertidas en pozos de aguas con cianuro que perduraran por los siglos de los siglos, si no es que se rompen con las explosiones realizadas con las siete mil toneladas de Anfor, que se prevé, serán utilizadas en la explotación, y envenenan los acueductos de las aéreas metropolitanas de Bucaramanga y de Cúcuta. Que ocurra este desastre es factible y es de conocimiento del señor Procurador General de la Nación, doctor Alejandro Ordoñez. No habría riqueza alguna capaz de indemnizarnos.
El Centro para la Salud y el Medio Ambiente Global, de la Universidad de Harvard, seguramente no tiene conocimiento de la tragedia a que pretenden someter a los habitantes de los dos Santanderes en Colombia, pero una de sus recientes conclusiones dice: “Debemos terminar con la minería a cielo abierto en las zonas montañosas, recuperar los lugares en donde se ha adelantado y garantizar que las fuentes de agua allí ubicadas sean seguras para el consumo humano."
Las poblaciones de las laderas del páramo de Santurbán que ya han sido ilusionadas y conquistadas, deben mirarse en el espejo de la miseria que les ha traído a otras comunidades la explotación del oro a pesar de que para ellas no se presentían las tragedias que estarán latentes en este caso.
Proteger los recursos naturales tan valiosos que tenemos en Santurbán, es un deber de nosotros los del Gran Santander y un compromiso ineludible con la patria.
FENALCO-RODOLFO MORA MORA, Presidente Junta Directiva
San José de Cúcuta, 28 de Febrero de 2011

No hay comentarios: